Yo ya cedí mi poder al destino que me rige

A las mujeres transformadas

Dibujo: Marina Mangieri







Sanando amando pasando todas las cosas ahora. Partes partecitas solita pero con fuerza de tauro y oscuridad escorpiana. Vamos hermanadas. Presas del movimiento y la transformacion. Enfermas deformadas, paradas, miradas. De golpe nubarrón humo pasado hubo pasado resignificalo presente se siente venir. Bienvenida  hermosa, princesa mentirosa. Algo de lo multifacético. La pregunta se repite, pasan los años y permanece: are we humans or are we dancers? Se agradece que permanece. Convoca al cuerpo la danza y me penetra una fuerza creadora de mujer que absolutamente perdida y desfazada, cuestiona su tiempo. Yo ya cedí mi poder al destino que me rige. Voy al encuentro. No sé nada. Voy desnuda. Voy apasionada. Voy cantada y alumbrada no iluminada voy amada. Voy al encuentro. Extasiada. En plena sanación. En la búsqueda perseverante de una intensidad. Encontrada como forma, como expresión de la risa. Voy sin prisa, traspolando los tiempos, bancando los pensamientos, casi sin sentimientos, a donde me lleve el viento. Presente verde de cáscara madura a punto putrefacción. A punto de comerte la carne cruda. Apenas podes parar de escribir. Por momentos contundentes atados a lo real, que sin embargo te alimentan. Pero solo apenas podes parar de escribir. Adicta. Bailo. Acá bailo, acá no tengo dudas de que estoy bailando lo que siento. Mutismo urbano y profecía de vanguardia afectiva que transforme las relaciones de familia en este mundo. En ese contexto buscate un lugar que convenga a tu potencia y expresate. Amate, liberate, soltate, relajate, escuchate, tocate, acariciate, abrigate y sacudite. Transformate y tomate un mate porque estamos todas del tomate. 




Comentarios

Entradas populares